Vinculado con milicias iraníes, según el Pentágono. Biden ordenó el ataque "para dejar claro que Estados Unidos se defenderá" y "está totalmente preparado para tomar otras medidas necesarias". Además, un dron militar estadounidense no tripulado fue derribado en espacio aéreo internacional cerca de Yemen.
El secretario de Defensa, Lloyd J. Austin III, informó este miércoles en un comunicado de que, por órdenes del presidente, Joe Biden, se lanzó un ataque aéreo "en defensa propia" contra una instalación en el este de Siria usada, dijo, por la Guardia Revolucionaria de Irán.
Dos cazas de combate F-15 bombardearon un almacén de armas, explicó, "en respuesta a una serie de ataques contra personal estadounidense en Irak y Siria" por parte de estas milicias iraníes.
"El presidente no tiene mayor prioridad que la seguridad del personal estadounidense", agregó Austin, "y ordenó la acción de hoy para dejar claro que Estados Unidos se defenderá" y "está totalmente preparado para tomar otras medidas necesarias".
Austin urgió a evitar "una escalada" militar, en el marco de la tensión en Medio Oriente por la guerra de Israel contra Hamas, y advirtió además de que se seguirán realizando misiones contra el grupo terrorista Ejército Islámico (ISIS, por su sigla en inglés) en Irak y Siria.
Este bombardeo es el segundo en menos de dos semanas contra instalaciones presuntamente usadas por milicias vinculadas a los ataques que sus tropas están sufriendo en Siria e Irak. En la última semana se han producido al menos 10, sumando al menos 38 desde el 17 de octubre, según indicaron fuentes militares a la cadena NBC News. La mayoría son con drones o cohetes, y ninguno ha causado hasta ahora víctimas o daños a infraestructuras. Sin embargo, en ataques anteriores vinculados a Irán resultaron heridos al menos 45 militares estadounidenses, según NBC News.
